Potencializar en niños y niñas de educación básica primaria, un sano sentido de vinculación que refleje el amor a otros en relaciones interpersonales sanas, requiere de su participación constante en espacios grupales para que pueda ensayar sus habilidades comunicativas. Dadas las dificultades actuales que impiden que el niño se encuentre con su grupo de pares de manera continua y enriquecedora; es preciso, que en el medio familiar se preste atención a esta necesidad para contrarrestar el sentimiento de soledad, la sensación de aislamiento y posibles manifestaciones de ansiedad o depresión que puedan presentar los niños o niñas. A continuación, algunos tips que pueden orientar este acompañamiento:
1. Ayúdele niño o niña a contactarse con sus propias emociones y a comunicar verbalmente diferentes estados emocionales.
2. Atienda a las expresiones faciales, corporales y al tono de voz, no solamente a las palabras; esto para indentificar que siente realmente el niño.
3. Involúcrelo en tareas motrices dinámicas y estáticas que le ayuden a contactarse con su ritmo corporal, por ejemplo la danza.
4. Realice con el niño juegos de imitación e identificación que le ayuden a ponerse en el lugar del otro.
5. Involúcrelo en técnicas que ayudan a manejar la ira o que le ayuden a desarrollar habilidades alternativas a la agresión. El espejo es un buen aliado en este tipo de juegos.
6. Ayúdele a interiorizar normas o reglas sociales por medio de los juegos de mesa.
7. Comprenda que la literatura y el relato de historias familiares o la exploración de historietas le ayudará a manejar sus sentimientos y sus emociones negativas.
8. Acompáñelo en el juego de las preguntas y respuestas para que guíe al niño en la exploración y expresión adecuada de sus sentimientos.
9. Comparta acertijos, adivinanzas, trabalenguas, rimas que incluyan indirectamente la resolución de problemas sociales.
10. Toque al niño con afecto genuino, abrácelo, mirelo con amor; esto ayuda a sanar su Yo Corporeo y lo prepara para cuando tenga oportunidad de abrazar a sus amigos.
11. Por último, permítale que tenga reuniones grupales con sus familiares o amigos por medios virtuales.
Dora Luz Rios Rios
Estimados padres de familia recuerden que es muy importante ayudar a sus niñ@s a reconocer y comprender sus emociones y en ese proceso a gestionar sus frustraciones; es decir, enseñar capacidad de espera, autocontrol y paciencia.
El Neuropsicólogo Alvaro Bilbao nos recuerda el efecto negativo que tiene la sobreprotección en la infancia pues aumenta el miedo, la inseguridad y afecta profundamente la autoconfianza y la capacidad de afrontamiento; ademas resalta el valor de proteger al niñ@ de los estímulos que puedan interferir en su desarrollo natural, y tener cuidado de no caer en la sobreestimulación con juguetes , exceso de actividades, exceso de tareas o de cursos de instrucción o con un excesivo tiempo frente a estímulos digitales pues se les esta negando la posibilidad de pasar por la lentitud del mundo real.
Nos invita a recordar que el cerebro son conexiones, por lo tanto, es necesario ayudarle al niño a crear conexiones neuronales utiles y para ello es preciso saber que el cerebro se conecta por:
Maduración, proceso que es natural.
Tambien lo hace por experimentación en el mundo físico.
Por observación del lenguaje, de los comportamientos sociales, de los hábitos y de los valores.
Tambien hay conexiones por procesos de instrucción
Y por refuerzo.
Por último nos deja una reflexión sobre como relacionarnos con el cerebro del niño de acuerdo a la teoria de los tres cerebros en uno solo:
El cerebro primitivo encargado de la funcion de proteccion, nutricion, descanso y reproducción; con el cual nos relacionamos especialmente cuando el niño tiene de 0 a 2 años de edad donde basicamente nuestra tarea es calmar necesidades.
El cerebro emocional que cumpe funciones importantes de motivación y memoria; a partir de los dos años de edad donde nos debemos relacionar desde el afecto y la empatia y nuestra tarea más importante en esta edad preescolar es ayudarle a reconocer sus emociones y darle tiempo para que las gestione adecuadamente.
Y por último el cerebro racional cuyas funciones son la toma de decisiones, el razonamiento, el juicio, la lectura, escritura entre otros procesos; donde nos relacionamos dando explicaciones, ayudando a ver situaciones desde diferentes perspectivas y enseñando a solucionar problemas de manera lógica.
Estimados padres de familia, a continuación les comparto recomendaciones sobre la manera de establecer pautas de corrección en el medio familiar:
1. La aplicación del patrón de corrección debe realizarse de manera consistente, no debe alterarse de acuerdo al estado de animo personal o de acuerdo a los caprichos del niño(a).
2. Las correcciones deben ser aplicadas por los miembros de la familia o adultos que ejercen autoridad sobre el niño(a), quienes deben estar de acuerdo antes de aplicar el correctivo para no desautorizarse. Es importante tener en cuenta que debe hacerse inmediatamente después de la transgresión de la regla o la norma y debe llevarse a cabo de manera segura y tranquila para no generar inseguridad, rabia o manipulación de parte de el(a). Recuerde que la disciplina evita que el padre se torne permisivo o agresivo; por lo tanto, es una manifestación de ecuanimidad y equilibrio.
3. No se enfrasque con el(a) en discusiones o en tratar de hacerse escuchar mientras está gritando o llorando. Hable mínimamente. Al principio será difícil, si usted permanece en calma y con una actitud firme, el se dará cuenta que usted no cederá a sus deseos.
4. Cuando esté aplicando el correctivo intente no establecer contacto físico ni responder a sus requerimientos, mucho menos si lo hace por medio del grito o del llanto. Y no establezca contacto visual hasta que no se calme.
5. Cuando estropee algún objeto con rabia intencional, debe restituirlo: limpiando, arreglándolo o tomando dinero de su mesada para adquirirlo nuevamente. Si el niño causó algún daño sin mala intención, solo por efecto de una actitud distraída, no debe haber castigo.
6. La habitación del niño(a) debe ser un espacio que le permita retornar a la calma. Es necesario monitorearlo, no cerrar la puerta ni apagar la luz. Puede hacerle un cojín para que lo golpee cuando está molesto, explicándole que es normal sentir ira pero que ello no significa que los demás reciban sus consecuencias.
7. Practique con sus hijos la negociación para la realización de sus deberes sin dejarse manipular y sin que reciban un premio material a cambio de sus obligaciones.
8. Establezca un horario de rutinas, preferiblemente visual para que el niño(a) reconozca sus responsabilidades y las lleve a cabo de manera ordenada. Este, debe incluir lo que sucederá con la tarea señalada o indicada.
9. Establezca el ritual del amor con cada uno de sus hijos, de acuerdo a su personalidad y a sus intereses, acompañado de manifestaciones físicas de afecto, conversaciones, lecturas, oraciones, juegos o canciones.
10. Cuando le haga promesas a su hijo, por favor, cúmplale: hacer un barco de madera, jugar a la guerra de almohadas, cocinar juntos, compartir un vídeo juego, ver una película, etc.
11. Lo más importante, esfuércese por ser un modelo sano para que sus hijos imiten. Disfrute permanente de la compañía de su hijo(a), no aumente su comportamiento negativo porque se siente solo o abandonado.
Dora Luz Rios Rios.
Dora Luz Ríos Ríos
Estimados padres:
A continuación les sugiero una serie de actividades, pequeños proyectos o juegos que pueden realizar con sus hijos en casa para ocupar sanamente su tiempo de ocio y que además, les ayudará en su desarrollo motor, sensorial, cognitivo y emocional.
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Permita que jueguen con agua, jabón, arcilla, tierra o arena , elementos que son terapéuticos y les ayudará en la resolución de las tensiones que sienten al relacionarse con el mundo adulto, apoyando la sanación de sus emociones negativas.
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Realicen en familia ejercicios de toma de conciencia corporal frente al espejo, sentado, tumbado en el piso, como juegos de respiración, relajación, considerando un espacio silencioso y apoyado con sonidos suaves.
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Fomente diferentes formas de expresión teniendo en cuenta actividades como el dibujo, la pintura, la escultura, la música, la danza o los juegos de representación.
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Facilite materiales para que desarrollen diferentes actividades manuales como: recortado, amasado, calcado, plegado, cosido.
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Ayúdelos en su desarrollo del esquema corporal, kinestesia y tono muscular con juegos de contacto, juegos de oposición, de equilibrio, de precisión y juegos en la obscuridad.
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Disfruten en familia con diferentes juegos de construcción como bloques lógicos, cubos rubik, bloques de lego.
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Motívelos a interesarse por diferentes juegos reglados de mesa como escalera, domino, loterías, juegos de asociación, scrabble, monopolio, ajedrez, entre otros.
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Involúcrelos en actividades de jardinería, culinaria, decoración y organización de espacios familiares.
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Compartan videojuegos y disfruten de diferentes aplicaciones con fines pedagógicos.
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Dora Luz Ríos Ríos
Nuestros hijos recibiendo formación escolar de manera virtual.
Estas recomendaciones son de gran ayuda para facilitar la concentración, memorización y comprensión de los temas académicos. Es importante:
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Que el niño no altere hábitos de sueño y de higiene.
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Que el niño este bien hidratado, que tenga una alimentación balanceada y realice actividad física regularmente.
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Controlar el consumo de bebidas azucaradas y de golosinas.
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Disponer un lugar de estudio tranquilo, sin distracciones visuales ni auditivas.
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Motivar el orden en el espacio de estudio para favorecer la concentración y la motivación.
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Regular el acceso a los juegos y medios tecnológicos (televisión, celular, tablet, videojuegos).
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Ser constante en el acompañamiento o supervisión mientras el niño desarrolla sus tareas escolares.
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Definir tiempos para la rutina académica que considere los periodos de atención del niño , la disponibilidad del tiempo del adulto que acompaña y la cantidad de tareas por realizar.
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Considerar pausas activas y períodos de descanso entre lección y lección para que el niño cambie de posición, descanse sus ojos, se hidrate, converse o juegue por períodos cortos.
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Recomendarle que leer no es la mejor manera para memorizar; se precisa la discusión, realizarse preguntas, elaborar resúmenes o esquemas conceptuales.
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Recordarle que debe relacionar las nuevas lecciones con temas ya vistos.
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Igualmente que recuerde pasos, actividades o procesos a lo largo del día.
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Que realice análisis sobre la aplicabilidad de los temas vistos; la ejemplificación ayuda a retener contenidos de manera significativa.
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Tener como hábito el repaso diario de las lecciones vistas, así no haya tareas pendientes.
A continuación, algunos comportamientos saludables para mejorar la atención, la concentración y el auto control de nuestros niños y niñas en casa.
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Ubique el área de realización de tareas en el espacio más tranquilo y silencioso de la casa.
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Recuérdele que solo puede empezar su trabajo cuando tenga todos los implementos necesarios a mano, cuando haya guardado los que no necesita y cuando esté dispuesto corporalmente.
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Al hablarle, darle una instrucción o recordarle una orden, mírelo a los ojos, cerciorándose de que le esté prestando atención.
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Al explicarle la estructura de una tarea, sea claro, ordenado y preciso.
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Utilice el paso a paso para el desarrollo de las explicaciones que le da. Evalúe cada paso antes de que continúe con el siguiente.
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Después de darle una instrucción, escuche su re alimentación para estar seguro de su entendimiento. Acompáñelo hasta que ejecute la orden dada. No permita que pase a otra actividad hasta que haya terminado la primera.
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Supervise la manera como organiza sus útiles escolares y el lugar de trabajo al terminar las labores escolares. Establezca una rutina diaria para organizar sus materiales de trabajo.
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Ayúdele para que sus intervenciones sean lógicas y coherentes, no se deje enganchar de su habla excesiva o de su lenguaje absurdo. No permita que le interrumpa, estimule permanentemente su silencio utilizando códigos visuales, señales o toques corporales que le indiquen cuando está perdiendo el control.
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Entre tarea y tarea realice con él pausas activas (ejercicios de relajación, estiramientos, descansos visuales e hidratación) para que se relaje corporal y mentalmente. Dele pequeños descansos donde pueda pararse o caminar.
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Tenga a mano un variado banco de fichas (adivinanzas, trabalenguas, rimas, crucigramas, sopas de letras) para mejorar la atención, la concentración y la memoria.
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Involúcrelo en juegos de mesa y monitoree que cumpla con las reglas de juego y que permanezca hasta el final en la actividad.
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Siempre manifiestele su apoyo, aceptación y amor incondicional. Corrija su comportamiento pero no castigue su esencia.
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